22.6.06

Donde dé más la luna

La vida se escapa entre nuestros dedos y lo peor es que nos damos cuenta y no podemos hacer nada. Plantamos semillas en cada bosque que encontramos, pero olvidamos regar la mayoría. Otras, con lágrimas, hacemos que crezcan, al menos hasta que podamos sonreír.

Consumimos cada segundo sabiendo que no va a volver, que no habrá nadie que venga a devolvérnoslo, pero puede que haya alguien dispuesto a hacer del siguiente el mejor de nuestra vida. Sólo hay que saber plantar en el bosque adecuado, en el rincón propicio, donde dé más la luna.

Hay demasiadas cosas que nos preocupan y, en el fondo, sólo debería haber una. Todo lo demás es secundario cuando se trata de la gente que nos importa. Incluso nosotros mismos. Deberíamos centrarnos en hacer felices a los demás confiando en que alguien lo hará por nosotros. Dejarnos caer de espaldas, con los ojos cerrados, sabiendo que habrá alguien para cogernos. Entonces no importa que la vida se vaya porque esa persona se viene con nosotros y nuestra vida. Todos tenemos a alguien dispuesto a hacerlo, a alguien que dejaría todo para sujetarnos. Sólo hay que saber plantar en el bosque adecuado, en el rincón propicio, donde dé más la luna.

3 Comentarios:

Anonymous Anónimo dijo...

"Incluso nosotros mismos. Deberíamos centrarnos en hacer felices a los demás confiando en que alguien lo hará por nosotros."

Me gusta ese leift motiv, amigo... Hay que estar bien con uno mismo y con aquello sobre lo cual puede influir...

Plantar en un bosque es complicado... y más después de un incendio.

Saludos!!

23 junio, 2006 09:57  
Blogger albius dijo...

Déjate caer...

:)

23 junio, 2006 12:12  
Anonymous Anónimo dijo...

hola pedorro!
bonito textooo!

muaaaaa!

27 junio, 2006 00:42  

Publicar un comentario

<< Home